El 70% de las empresas aumentarán sus inversiones en tecnología para el 2023

10 octubre, 2022 0 Por Nicolás Contreras

A pesar de las tensas relaciones entre EE.UU y China, así como la escasez de chips, la inversión en tecnología sigue siendo de interés para las compañías.

Las empresas de tecnología de alto crecimiento han sido las más afectadas por los recientes cambios en el mercado, sin embargo, se espera que el 70% de las empresas aumenten sus presupuestos de tecnología en 2023 o lo mantengan igual, según una nueva investigación de Bain & Company. Y es que a pesar de la incertidumbre global por una recesión económica, la tecnología seguirá siendo una inversión importante y una fuente central de productividad en todas las empresas.

“Hoy los líderes ejecutivos ven la inversión en innovación y herramientas digitales como una forma de impulsar la productividad, la velocidad y la competitividad, incluso en entornos presupuestarios difíciles. En ese orden de ideas, si bien han habido impactos financieros que han sido  originados por el comportamiento de los mercados y las crisis internacionales, la inyección de recursos en esta área sigue ocupando un renglón primordial en la contabilidad de las compañías”, indicó Diego Santamaría, socio de Bain & Company.

Este escenario crítico, de acuerdo con la consultora, se ha acentuado debido a varios factores. El primero de ellos es la constante tensión en las relaciones entre China y EE.UU. que ha desembocado en conflictos tanto comerciales como regulatorios; y el segundo, la escasez de chips, que ha dificultado la accesibilidad a estos insumos por parte de las empresas, llegando a generar dificultades en las cadenas de producción.

A pesar de que exista un panorama adverso, Bain & Company destaca la importancia de cómo la reventa y el reciclaje de productos pueden funcionar no solo para beneficiar al medio ambiente, sino también para beneficiar a las empresas al darles una ventaja competitiva en materia tecnológica. Más aún cuando las compañías de esta industria continúan enfrentando la presión tanto de los inversores, clientes y reguladores para reducir su huella de carbono.